28 de marzo de 2014

Agota ser negativa por aquí, pero siempre cuando no tengo quien me escucho te utilizo. Gracioso, por que así me utilizan a mí,  cada vez que tienen dramas.
¿Para que piden consejos si no los aplican?
¿Para que me hacen decir palabras repetitivas una y otra vez si cada uno hace lo que el corazón le dice?

Se me acaban las ganas de estar siempre ahí, para todos si pocas veces me retribuyen escuchando mis problemas banales.
Si buscan consejo para sus subjetivos drama queen's, mi opinión siempre será objetiva. Pero usen colador. Soy persona, soy humana y NO por estar cesante y sola como moco en mi casa tengo menos derecho a ser escuchada y valorada.
xoxo

6 de abril de 2013

La hoja blanca y fome

No sé cual es mi problema. Me siento bicho raro hace días. Tengo amigos, familia y pololo. ¿Qué es lo raro entonces?
No soy de salir mucho, no tengo un grupo de amigos prendidos que me inviten a salir cada viernes. Mis amigos no se conocen entre sí, y viven lejos. No tienen nada en común, pero son al fin y al cabo, mis amigos. Es decir, amigas. Por que amigos, nunca he tenido. Cuando he creído que tengo uno se pasa para el otro lado, comienza el joteo, se alejan y chao. Es incómodo no tener un amigo que me muestre la visión masculina de las cosas, que sea sincero y partner. Un amigo! Que lindo sería.
Luego viene la definición de mis amigas, algunas parecidas a mi: Tranquilas, más bien pasivas, alegres, caseras, de salir mucho a conversar y no tomar. Yo tomo, y es una actividad que no puedo realizar con todas mis amigas, por que ellas no lo hacen. Mis otras amigas salen, carretean. El otro día me invitó una amiga que estudia en Valparaíso. A nada más, ni nada menos que el mítico Roma. Ese lugar plagado de estudiantes borrachos y arriba de la pelota. Un solo vaso de cerveza y creo que quizás necesito emborracharme para poder ser feliz. No puedo, veo que todos rien, y saltan eufóricamente. No me gusta cualquier cerveza, no tomo para borrarme, no tomo para olvidar. ¿Qué está mal entonces? Soy joven, no me encuentro fea, no me encuentro depresiva, más bien alegre pero con quienes yo conozco.

El panorama con el pololo es un poco similar. Cuando hay plata, salimos, y si no, compramos para tomar en casa. Pero se que para el no soy  la mejor compañera de carrete del mundo.Da pena ver que cuando sus amigos desaparecidos le mueven la cola, el vuela feliz y toma, toma, toma... y feliz. Y yo ahi, callada, pero tomando sus dos o tres vasos como máximo.
Salimos con una pareja de amigos y ellos casi no salen a bailar, por ende hemos rechazado las invitaciones ultimamente. Sin mentir hace casi 1 año que no salgo a bailar, a excepción claro de los conciertos.
Y a estas alturas me sigo preguntando cual es el problema.
Recuerdo que la única vez en que me senti media borracha fue cuando pedimos una cerveza de más y tuvimos que consumirla para no dejarla, andaba toda jappy.
¿Entonces tomar y tomar para ser feliz? ¿O ser más extrovertida?
Pero aquí es donde me pego con la pared: Yo no soy así. Y nunca lo seré. Y si lo soy alguna vez, será por haber hecho muchos esfuerzos.
Pero ya haciendo eso, ¿seré feliz? Ahora lo soy, me gusto. Me acepto. Pero otros no aceptan mi carácter fome, y creo que ahi está el drama. No puedo ver como la gente se aburre conmigo; pero no puedo hacer nada. Yo soy extrovertida cuando QUIERO y con quien quiero. Sólo con 3 a 4 personas. Los demás que se jodan.
No tengo experiencia borracha, no tengo aventuras con minos X por que no tuve la oportunidad, o por que simplemente no lo necesité por que ya tengo lo que quiero. El drama está en que siento que todo mundo se cae y tropieza y la pasa bien. Y yo nunca he caído, y experiencia no tengo. Soy una hoja en blanco. Fome y blanca. Eso soy.

15 de diciembre de 2012

Terrible el remolino de sensaciones esta semana que pasó. Y sigue como bola de nieve...

8 de diciembre de 2012

Read under lines

Tu, y tu personalidad marina, variable, vulnerable. No puedo lidiar con semejantes tormentas diarias; necesito respirar. Para ti, la bruja, la celópata, la asfixiante. Para mi, el extraño y el conocido, lo imprevisto, las decepciones. Siento no poder seguir adelante nadando, pero necesito volar.

28 de noviembre de 2012

Dear partner

Hay de aquellos que no entienden a donde van y que saben disimular. Sienten un abanico de conceptos que se les arrancan con el viento en la habitación vacía. Quieren huir y cuando lo hacen, quieren volver.
Quieren correr y no mirar atrás. Quieren espacio pero a la vez estar completos.

Acompáñame a estar sola. Eso podría resumir esta cantidad estúpida de palabras que tratan de ocultarse y salir.

19 de noviembre de 2012

La estatua


Era el fin del mundo, de la humanidad y solo algunos permanecían con vida. Entre ellos, estaba Pedro. 
Pedro el que se aferraba a una fotografía de una revista. El que no tenía razón de vivir más que la modelo de la foto y su sonrisa esperanzadora; quien lo había perdido todo, menos el amor por "Isabel".



Muchos corrían y se perdían en los refugios que se caían a pedazos. Pedro seguía ahí  bajo la estatua, esperando. Sabía que la de la sonrisa aparecería de una vez. Llovía sangre y el permanecía inmovil. No dejaría que esas amenazas borraran sus corazonadas de encontrarla viva. Sabía que vivia, que usaba el mismo chaleco largo azul y seguramente andaría con su pelo castaño un poco sucio por haber dormido bajo un montón de cartones y ropa sucia.

- Hey, chico! Muevete de ahí, eres blanco fácil! - Si quieres refugio hoy, puedes venir, somos 3 y tenemos fuego.
Pedro levantó la cabeza y vio a una niña de pelo rubio. Su cabeza se asomaba por la tapa del alcantarillado, y tenía las mejillas rojas por el frío. Se levantó y guardó la fotografía en el bolsillo de la chaqueta. Quizás mañana aparecería Isabel. A no ser que haya ido con ese grupo rescatista al Cerro Barón. Ya lo averiguaría.